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Adolfina Mejia
diciembre 01, 2024
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El presidente de EE. UU., Joe Biden, indultó a su hijo Hunter, evitando así una posible condena a prisión por delitos relacionados con armas e impuestos.
La decisión contradice la promesa de Biden de no utilizar el poder presidencial en beneficio de su familia. La medida tiene lugar poco antes de la sentencia y el inminente regreso de Donald Trump a la Casa Blanca.
Biden, declarado culpable de tres delitos relacionados con posesión de armas, al ocultar en la compra su adicción a las drogas. El mandatario saliente argumenta que los problemas judiciales de su hijo tienen motivaciones políticas.
"Hoy firmé un indulto para mi hijo Hunter. Desde el día que asumí el cargo, dije que no interferiría en la toma de decisiones del Departamento de Justicia y mantuve mi palabra incluso cuando vi cómo mi hijo era procesado de manera selectiva e injusta", dijo el presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, en un comunicado difundido este domingo por la Casa Blanca.
En junio pasado, Hunter Biden fue hallado culpable de tres delitos graves en un juicio federal por posesión ilegal de armas. Esta es la primera vez en que el hijo de un presidente en funciones en Estados Unidos es condenado.
Los tres cargos de los que fue encontrado responsable fueron mentir a un comerciante de armas con licencia federal, hacer una declaración falsa en la solicitud al decir que no consumía drogas y tener el arma de forma ilegal durante 11 días.
Todos están relacionados con la compra de un revólver en 2018 cuando, según argumentaron los fiscales, el hijo del mandatario mintió en un formulario obligatorio de compra de armas al decir que no consumía drogas ilícitas ni que era adicto a ellas.
"Ninguna persona razonable que analice los hechos de los casos de Hunter puede llegar a otra conclusión que no sea que fue un blanco solo porque es mi hijo", afirma en su comunicado de este domingo el presidente Biden.
La Casa Blanca había asegurado en numerosas ocasiones que Biden no indultaría ni conmutaría las sentencias de su hijo, un adicto a las drogas en recuperación que se convirtió en el blanco de los republicanos, incluido el presidente electo Donald Trump.
"Ha habido un esfuerzo por acabar con Hunter, que lleva cinco años y medio sobrio, incluso frente a ataques implacables y un procesamiento selectivo. Al intentar acabar con Hunter, han intentado acabar conmigo, y no hay motivos para creer que esto se detendrá aquí. Ya es suficiente", sostuvo.
Biden dijo que había tomado la decisión durante el fin de semana. El presidente, su esposa, Jill Biden, y su familia, incluido Hunter, pasaron el feriado de Acción de Gracias en Nantucket, Massachusetts, y regresaron a Washington el sábado por la noche.
"Esta es la verdad: creo en el sistema judicial, pero a medida que he luchado con esto, también creo que la política cruda ha infectado este proceso y ha llevado a un error judicial y, una vez que tomé esta decisión este fin de semana, no tenía sentido retrasarlo más", remarcó Biden.
Biden, declarado culpable de tres delitos relacionados con posesión de armas, al ocultar en la compra su adicción a las drogas. El mandatario saliente argumenta que los problemas judiciales de su hijo tienen motivaciones políticas.
"Hoy firmé un indulto para mi hijo Hunter. Desde el día que asumí el cargo, dije que no interferiría en la toma de decisiones del Departamento de Justicia y mantuve mi palabra incluso cuando vi cómo mi hijo era procesado de manera selectiva e injusta", dijo el presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, en un comunicado difundido este domingo por la Casa Blanca.
En junio pasado, Hunter Biden fue hallado culpable de tres delitos graves en un juicio federal por posesión ilegal de armas. Esta es la primera vez en que el hijo de un presidente en funciones en Estados Unidos es condenado.
Los tres cargos de los que fue encontrado responsable fueron mentir a un comerciante de armas con licencia federal, hacer una declaración falsa en la solicitud al decir que no consumía drogas y tener el arma de forma ilegal durante 11 días.
Todos están relacionados con la compra de un revólver en 2018 cuando, según argumentaron los fiscales, el hijo del mandatario mintió en un formulario obligatorio de compra de armas al decir que no consumía drogas ilícitas ni que era adicto a ellas.
"Ninguna persona razonable que analice los hechos de los casos de Hunter puede llegar a otra conclusión que no sea que fue un blanco solo porque es mi hijo", afirma en su comunicado de este domingo el presidente Biden.
La Casa Blanca había asegurado en numerosas ocasiones que Biden no indultaría ni conmutaría las sentencias de su hijo, un adicto a las drogas en recuperación que se convirtió en el blanco de los republicanos, incluido el presidente electo Donald Trump.
"Ha habido un esfuerzo por acabar con Hunter, que lleva cinco años y medio sobrio, incluso frente a ataques implacables y un procesamiento selectivo. Al intentar acabar con Hunter, han intentado acabar conmigo, y no hay motivos para creer que esto se detendrá aquí. Ya es suficiente", sostuvo.
Biden dijo que había tomado la decisión durante el fin de semana. El presidente, su esposa, Jill Biden, y su familia, incluido Hunter, pasaron el feriado de Acción de Gracias en Nantucket, Massachusetts, y regresaron a Washington el sábado por la noche.
"Esta es la verdad: creo en el sistema judicial, pero a medida que he luchado con esto, también creo que la política cruda ha infectado este proceso y ha llevado a un error judicial y, una vez que tomé esta decisión este fin de semana, no tenía sentido retrasarlo más", remarcó Biden.
Fuente/ Frances24.com.es
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